¿Vuelos baratos?

Seguro que tooooodas las veces que has ido a comprar un billete en internet te has cagado en todo de los precios. ¿Baratos? Sí, pero, ¿y el cargo por tarjeta? ¿y el de reserva de asiento? ¿y el del equipaje? ¿y los panchitos durante el vuelo?

A estas buenas mujeres les pasó lo mismo y hartas, decidieron hacer esta parioda que llega al cúlmen con la ferking plastic. Hilarante de principio a fin, con bailecito incluído.

La nueva sensación de YouTube

Rebecca Black es una chica de 13 años de California de padres adinerados, que quiso cumplir su sueño de convertirse en cantante. Papá y mamá decidieron contratar a una empresa que por un módico precio, se encarga de niños bien. Y le compusieron esta canción:

Ódiala o ámala, pero lleva ya más de un millón de visitas en YouTube y hay quién la llama la nueva Justin Bieber. Yes que decidir en qué parte del coche te vas a sentar o decir que el domingo viene después del sábado son frases poéticas del mismíso Shakeaspeare.

Te la dejamos con subtítulos, por si tienes dudas:



Y han salido tantas parodias, que algunas incluso, son mejores que la original:

Oso panda aterrorizado por el terremoto

Si los humanos se asustan al sentir un terremoto de fuerza 9, por mucho que los acostumbren de pequeños, los animales no son menos. Este pobre oso panda lo pasó tan mal ante la fuerza del seísmo, que no dudó en agarrarse todo lo fuerte que pudo a la pierna de este policía japonés.

Por suerte, nuestro peludo amigo, recibió consuelo, aunque es difícil explicarle lo que pasa, se lo imagina.

Perros viviendo el drama japonés

Llevar una vida de perros, no debe ser fácil, pero sufrir un terremoto, un tsunami, ver todo destrozado y que tu mejor amigo esté herido, debe ser terrible.

Esto fue lo que le pasó a estos dos perros japoneses, que por suerte, fueron localizados y a los que se les ha prestado ayuda.

Los hombres comentan que al principio pensaban que el perro herido estaba muerto, pero luego comprendieron que estaba vivo. Su leal amigo, les ladra para llamarles la atención. Tanto, que los hombres lamentan no haberles traído comida y posteriorme consiguen llevarlos a un refugio y a que el veterinario cuide del herido.

Menos mal que han sido rescatados. Ojalá otros animales y toda la gente que sigue viva, corran la misma suerte. Japón, ¡estamos con vosotros!

Puedes seguir el curso de la historia en esta página web.