El auténtico Slumdog Millionaire

29 de octubre de 2011


Sushil Kumar, que hasta ahora ganaba el equivalente a 93€ como profesor de informática, se ha convertido en la primera persona en ganar el premio máximo de "¿Quién quiere ser millonario?" de India. En una hazaña que recuerda a la historia contada en Slumdog Millionaire, la película famosamente galardonada en los Oscars, este joven de una provincia deprimida de India, ha ganado el equivalente a 750.000€. 5 millones de rupias que ayudarán a este hombre a construir una biblioteca en su localidad, ayudar a sus hermanos a abrir pequeños negocios, comprarse una casa y lo que se le eche encima.
Estamos seguros que Sushil le dará buen uso al dinero que él y su recién casada esposa, han obtenido.


Berlusconi mirando culos femeninos

Mientras media Europa está preocupada de la economía del continente, el presidente italiano no tiene nada mejor que hacer que comprobar si los culos de las mujeres europeas están en regla y siguen en su sitio.



Luego nos preguntamos cómo es posible que nuestros países vayan como van...

Zapatilla-cama


Este buen hombre inglés tiene un pie más grande que otro y le encantaron tanto las zapatillas monstruo, que decidió pedir unas. Cada una de su talla, claro.
El problema es que al hacer el pedido, los chinos de la fábrica se hicieron un lío haciendo el cálculo de la talla y fabricaron una zapatilla más grande que la otra. Mucho más grande. Cuando el cliente recibió el paquete, se quedó perplejo.

Pero más perplejos se han quedado los periódicos de medio mundo cuando descubrieron que el hombre de la foto había mentido acerca de su nombre. Y la historia.
Este hombre no es más que el directivo de la compañía que fabrica las zapatillas y su intento de autopromoción le ha salido redondo, esta foto corre por medio mundo.

Probablemente la mejor foto del Mundo



¡Foto Tuenti!

¡Si cortar por lo sano es lo mejor!

27 de octubre de 2011
Llevamos una vida tan estresante, que a veces te dan ganas de mandarlo todo a la mi***a y cortar por lo sano. ¿Quién no lo ha pensado alguna vez? ¿Y cuántas veces has estado a puntito de perder los nervios?

Eso mismo le pasó a estos dos chicos que estaban trabajando y al volver al furgón, una señora agente les había dejado un regalito en forma de multa. Mientras el conductor discutía que no, que había sido un momento y que no merecían pagar nada, su compañero se hartó y decidió que la conversación se atajaba cortando el problema de raíz.

Y eso mismo hizo: cortó el parquímetro en dos.


La señora agente buscando cobijo, no tiene desperdicio.